Baccarat
El Baccarat, un juego de elegancia y simplicidad, ha cautivado a los entusiastas de los casinos de todo el mundo durante siglos. Conocido como Punto Banco en su forma más popular, el Baccarat es un juego en el que el casino siempre es el banco de la jugada, y el resultado de cada ronda se basa puramente en la suerte, con los jugadores apostando por dos resultados principales – el jugador (punto) o el banquero (banco). A pesar de los términos, estas designaciones no representan a los jugadores reales ni a la casa, lo que hace que el juego sea intrigante pero sencillo.
El juego se juega con 6 u 8 mazos de cartas, y el objetivo es apostar por qué mano, la del jugador o la del banquero, alcanzará un total más cercano a 9. Las cartas del 2 al 9 conservan su valor facial, los ases cuentan como uno, y los dieces, jotas, reinas y reyes no tienen valor.
En un entorno tradicional, especialmente en lugares como los EE. UU. y Macao, el Baccarat atrae a grandes apostadores, con apuestas que a menudo comienzan en cantidades significativas, enfatizando su estatus entre los juegos de casino. La baja ventaja de la casa del juego lo convierte en un favorito, con la apuesta al banquero teniendo una ventaja ligeramente menor debido a una comisión sobre las ganancias, mejorando su atractivo entre los jugadores que buscan una ventaja sobre el casino.